La ortografía es la rama de la gramática que se ocupa de la
escritura correcta. Por convencionales que resulten las reglas que regulan la
ortografía, es obligación de todos los usuarios de nuestra lengua conocer
dichas reglas a fin de utilizarla con la mayor corrección.
Se denomina acento prosódico (o simplemente acento) a la
mayor fuerza de pronunciación que se carga sobre una sílaba de la palabra (a la
que se denomina sílaba tónica). Una palabra puede ser tónica, si
alguna de las sílabas que la componen presenta este acento, o átona, si
ninguna de sus sílabas sobresale de las demás. Cualquier palabra pronunciada
sola, fuera de contexto, es tónica. Solo en el contexto del discurso es posible
determinar si una palabra es átona.
Las palabras
átonas son escasas en número, pero muy importantes por el uso extensivo que se
hace de ellas. Entre ellas podemos citar las
siguientes:
- los
artículos determinados: el, la, lo, los, las...
- las formas
apocopadas de los adjetivos posesivos: mi, tu, su...
- los
pronombres personales que realizan la función de complemento sin
preposición: me, nos, te, os, le, la,
lo, los, las, les, se.
- los
relativos: que, cuanto, quien, cuyo.
- los
adverbios relativos con funciones no interrogativas o exclamativas: donde,
cuanto...
- el adverbio tan.
- las
conjunciones: y, o, que, si, pues, aunque...
- casi todas
las preposiciones: de, con, a...
- la
partícula cual cuando equivale a como (Como un ciclón
= Cual ciclón).
Las únicas palabras que poseen dos acentos prosódicos son
los adverbios de modo formados mediante la adición del sufijo -mente a
un adjetivo. El primer acento es el del adjetivo; el segundo es el
correspondiente al sufijo.
Se llama tilde o acento ortográfico a una
rayita oblicua (') que baja de derecha a izquierda del que lee o escribe, y que
se pone, en los casos adecuados, sobre alguna de las vocales de la sílaba
tónica de la palabra.
Las palabras agudas
son aquellas que tienen el acento prosódico en la última sílaba.
- con-ver-sar
- pas-tor
- com-pe-tir
- va-lor
- Or-le-ans
Las palabras graves
o llanas son aquellas que tienen el acento prosódico en la penúltima
sílaba.
- pro-tes-tan-te
- li-bro
- ra-bi-no
Las palabras esdrújulas
son aquellas que tienen el acento prosódico en la antepenúltima sílaba.
- prés-ta-mo
- hi-pó-cri-ta
- ag-nós-ti-co
- cré-di-to
- lle-gá-ba-mos
Las palabras sobreesdrújulas
son aquellas que tienen el acento prosódico en una sílaba anterior a la
antepenúltima sílaba. Se trata de dos tipos de palabras:
- adverbios
de modo terminados en -mente (palabras con dos acentos):
- di-fí-cil-men-te
- e-vi-den-te-men-te
- fá-cil-men-te
- ob-via-men-te
- formas
verbales formadas por la composición de dos pronombres personales átonos
con una forma verbal:
Reglas
básicas
Los monosílabos
(sean átonos o no) no llevan tilde. Se exceptúan aquellos monosílabos tónicos
que coinciden en su grafía con otros átonos, en cuyo caso se coloca tilde en el
monosílabo tónico. Esta tilde se denomina tilde diacrítica.
Se acentúan
todas palabras agudas que terminan en vocal, o en n o s
solas.
- tam-bién
- ja-más
- lec-ción
- se-gún
- a-de-más
Las palabras agudas
que no terminan en vocal, o en n o s solas, nunca se
acentúan.
- vir-tud
- na-cio-nal
- re-loj
- a-co-me-ter
- Or-le-ans
- fe-liz
Nunca se
acentúan las palabras llanas que terminan en vocal, o en n
o s solas.
- me-dios
- lla-na
- re-ve-la
- mo-do
- sub-jun-ti-vo
Las palabras llanas
que terminan en otras letras siempre se acentúan (a estos efectos no se
considera la letra x representada por los fonemas /k/ + /s/,
sino como tal, y por tanto, las palabras llanas terminadas en x llevan
tilde).
- di-fí-cil
- cár-cel
- au-to-mó-vil
- bí-ceps
- Gon-zá-lez
- i-nú-til
- án-trax
Todas las
palabras esdrújulas se acentúan.
- ás-pe-ra
- es-drú-jula
- ca-tó-li-co
- pro-pó-si-to
- éx-ta-sis
La tilde
diacrítica se coloca sobre ciertas palabras para distinguir entre diversos
significados del vocablo, según que sean tónicos o átonos. La tilde se coloca
sobre la palabra tónica aunque según las reglas generales no corresponda
colocar tilde. Hay varias categorías:
- monosílabos tónicos
que coinciden en su grafía con otros átonos:
- más
(adverbio de cantidad): Quiero más comida.
- mas
(conjunción adversativa con el significado de pero): Le pagan,
mas no es suficiente.
- tú
(pronombre personal): Es preciso que vengas tú.
- tu
(adjetivo posesivo): Dale tu cartera.
- él
(pronombre personal): ¿Estuviste con él?.
- el
(artículo): El vino está bueno
- mí
(pronombre personal): Todo esto es para mí.
- mi
(adjetivo posesivo): Trae mi calendario.
- mi (nombre
común): Concierto para oboe en mi bemol mayor.
- sí
(adverbio de afirmación): Él sí quería.
- sí
(pronombre reflexivo): Lo atrajo hacia sí.
- si
(conjunción condicional): Vendrá si quiero.
- si
(conjunción de interrogativas directa): Pregúntale si quiere venir.
- si (nombre
común): Concierto para piano y orquesta en si bemol.
- dé (del
verbo dar; cuando se le une algún pronombre, también se acentúa): Déme
ese dinero.
- de
(preposición).
- sé (de los
verbos ser o saber): Yo no sé nada, Sé un poco más educado.
- se
(pronombre personal y reflexivo).
- té (nombre
común): Póngame un té.
- te
(pronombre personal): Te voy a dar.
- para
evitar confusiones, lo que se conoce como anfibología (en caso de que no
existiese confusión, podemos prescindir de la tilde):
- aún
(adverbio temporal o de modo con el significado de todavía): ¿Aún
no ha llegado?.
- aun (resto
de casos): Ni aun él pudo hacerlo.
sólo
(adverbio equivalente a solamente): Sólo me quieres para eso.
- solo
(adjetivo con el significado de sin compañía): No estés sólo.
Determinantes y
pronombres demostrativos:
- los pronombres
éste, ésta, ése, ésa, aquél y aquélla,
así como sus plurales, llevan tilde para diferenciarlos de los
determinantes equivalentes.
- los
determinantes este, esta, ese, esa, aquel
y aquella y sus plurales no llevan tilde nunca.
- esto, eso
y aquello no llevan tilde nunca, puesto que son siempre
pronombres.
Hay que tener en cuenta que nunca llevan tilde los
pronombres demostrativos que actúan como antecedentes de un pronombre relativo
sin coma interpuesta entre ambos: Esos que trajiste no con adecuados.
- en
interrogaciones, admiraciones o expresiones de carácter dubitativo
(también en oraciones que presenten un matiz interrogativo o dubitativo,
aunque no existan signos de puntuación o admiración), también se acentúan:
- cómo: ¡Cómo
que no!, Me pregunto cómo habrá venido.
- cuál: Esa
es la habitación en la cual estuvieron, ¿Cuál es el tuyo?.
- quién: ¿Quién
lo ha dicho?
- qué: Pídele
lo que te debe, No sé qué hacer.
- dónde: ¡Dónde
fuiste a pedir dinero!.
- cuándo: Hazlo
cuando tengas tiempo, ¿Cuándo vienes?.
- cuánto, cuán:
No te imaginas cuán ridículo estás, ¿Cuantas cosas has traído?.
- por qué
(partícula interrogativa): ¿Por qué no vienes?.
- por que (grupo
átono formado por la preposición por más pronombre relativo o
conjunción subordinante que). En el primer caso siempre es posible
intercalar un artículo determinado: ¿Cuál es la razón por (la) que te
fuiste?. La segunda aparece cuando el verbo antecedente rige la
preposición por: Se decidió por que viniera Pepe.
- porque
(conjunción subordinante causal [átona]). Iré porque me lo pides, Porque
te quiero a ti...
- porqué
(nombre): Este es el porqué de su decisión.
-
- el hecho
de que tales palabras vayan en una oración interrogativa o exclamativa no
significa que tengan sentido exclamativo o interrogativo. Si no lo tienen,
no deben llevar tilde:
- ¿Eres tú
quien lo ha hecho? (la pregunta se refiere a tú)
- ¡Vendrás
cuando te lo diga!